6 Momentos cruciales en los que conviene guardar silencio.

Es cierto que tarde o temprano todo sale a la luz, aquello para lo que trabajamos se manifiesta en el mundo exterior, después de haber estado un tiempo "oculto", estamos hablando de un principio que se aplica tanto en la naturaleza como en nuestros proyectos de vida: "El principio de cuidar la energía y la semilla de manifestación".

Al igual que un bebé permanece nueve meses en el vientre de la madre, formando sus defensas y órganos o una semilla dura semanas e incluso meses debajo de la tierra, del mismo modo nuestros proyectos deben permanecer ocultos o protegidos cuando aún no están debidamente fortalecidos.

¿Por qué pasa esto?

Fácil, cuando tenemos una idea, puede ser fácilmente maleable, modificada, ya que no es algo tangible todavía. Si no posees el carácter suficiente, puedes verte expuesto a críticas, comentarios negativos respecto a tu proyecto e incluso puedes llegar a sentirte desmotivado y perder la energía vital que se genera al inicio de cualquier emprendimiento: El poderoso entusiasmo inicial.

Debemos ser muy sabios a la hora de compartir nuestros sueños y aspiraciones, lamentablemente el ego es muy fuerte y dañino en nosotros y en los que nos rodean, por lo que una dosis de discreción nos puede resultar beneficiosa.

Ahora bien, si alguien se acerca a ti y te cuenta de sus mil aspiraciones, hazle un favor: ¡No lo desmotives! No seas de esos que quieren forzar a los demás a vivir la vida según sus criterios y paradigmas. Escucha sabiamente, y deséale en tu corazón toda la suerte del mundo. Sé que es difícil (yo misma caigo en la trampa de dar consejos), pero con paciencia y amor es posible.

Aquí te comparto los 6 momentos en los que es conveniente guardar un poco de silencio y dejar que se fortalezca la energía:

1.Al inicio de cualquier empresa o proyecto.

2.Al inicio de una relación amorosa.

3.Planes de adquisición de bienes materiales, títulos, etc.

4.Los primeros 3 meses de un embarazo.

5.Planes de viajes, visado, contratos, etc.

6.En momentos de reinvención personal.

¡Feliz día, un abrazo!